Desde hace algún tiempo venimos asistiendo a un interesante debate sobre una de las características más esenciales del póker. ¿Estamos frente a un juego de azar o ante un juego de habilidad?
Si bien todavía en España segue considerado oficialmente como un juego de azar, no son pocos los países que ya han legislado en favor de considerarlo como un interesante juego de habilidad.
Legislaciones favorables a considerarlo un juego de habilidad
En agosto der 2012, un juez de distrito de los Estados Unidos determino que en el juego del poker predominaba mayoritariamente la habilidad, por lo que solicitó que no fuese incluido en las leyes federales que prohíben los juegos de azar.
En Europa ya son varios los países que también han apostado claramente por considerar al poker como un deporte de habilidad más que de azar. Concretamente, en Francia la Corte de Toulouse dictaminó en el año 2011 que el poker era un juego en el que predominaba la habilidad, y que como tal había que considerarlo.
Italia también se ha sumado recientemente a la lista de países de la Unión Europea cuya justicia reconoce al poker como un juego de habilidad. Así, tras la sentencia de la Corte Suprema italiana, en este país podrán celebrarse torneos de poker en la modalidad «Texas Holdem» fuera de los casinos.
Un informe muy interesante
En el año 2009 se publicó un interesante estudio realizado por PokerStars, Cigital y REEL (Rational Entertainment Enterprises Limited) que arrojaba unos resultados y unas conclusiones verdaderamente interesates. Después de presentar el amplio trabajo de campo y de observación realizado, el estudio concluía que «los resultados finales de 103 millones de manos observadas de Texas Holdem Poker fueron determinados por la habilidad en la mayoría de las veces, antes que por el azar y por un amplio margen».
Otro estudio realizado por Steven Levitt, profesor de Economía de la Universidad de Chicago, que se dedicó a analizar desde un ángulo científico los resultados de las Series Mundiales del año 2010 concluía que el poker era un juego de habilidad, más parecido al ajedrez que al bingo.